Los métodos anticonceptivos son un aspecto esencial de la salud reproductiva, que permite a las personas tomar decisiones informadas sobre su salud sexual y planificación familiar. Hay varios métodos anticonceptivos disponibles, cada uno con sus propias ventajas y desventajas. En este blog, exploraremos las tres categorías principales de métodos anticonceptivos: hormonales, de barrera y de acción.
En este blog, exploraremos las tres categorías principales de métodos anticonceptivos: hormonales, de barrera y de acción prolongada, y discutiremos su efectividad y posibles efectos secundarios.
Los métodos anticonceptivos hormonales
Son los tipos más utilizados. de anticoncepción funcionan alterando el equilibrio hormonal del cuerpo para evitar la ovulación. Hay tres tipos de anticonceptivos hormonales: anticonceptivos orales, inyectables y parches. Los anticonceptivos orales, se toman a diario y contienen una combinación de hormonas sintéticas de estrógeno y progesterona. Son altamente efectivos cuando se toman correctamente, con una tasa de fracaso de menos del 1%. Sin embargo, pueden tener efectos secundarios potenciales, como aumento de peso, cambios de humor y mayor riesgo de coágulos de sangre. Los inyectables, se administran cada mes o cada tres meses y solo contienen progesterona. También son muy eficaces, con una tasa de fracaso inferior al 1 %, pero pueden causar efectos secundarios como aumento de peso y sangrado irregular y alteraciones hormonales. Los parches, se aplican sobre la piel una vez por semana y contienen hormonas sintéticas de estrógeno y progesterona. También son altamente efectivos, con una tasa de falla de menos del 1%, pero pueden causar irritación de la piel y otros efectos secundarios.
Los métodos anticonceptivos de barrera
Funcionan al bloquear físicamente que los espermatozoides lleguen al óvulo. Hay tres tipos de métodos de barrera: condones (masculinos y femeninos), diafragmas y capuchones cervicales. Los preservativos, tanto masculinos como femeninos, son el método anticonceptivo de barrera más utilizado. Son altamente efectivos cuando se usan correctamente, con una tasa de falla de menos del 2% si se usa perfectamente, aunque si no lo utilizas de una manera correcta puede tener una tasa de falla de hasta el 20%. Los condones también pueden ayudar a prevenir la transmisión de infecciones de transmisión sexual (ITS).
Los diafragmas y los capuchones cervicales se insertan en la vagina y cubren el cuello uterino para evitar que entren los espermatozoides. Son menos efectivos que los condones, con tasas de falla que van del 6 al 12 %, pero pueden ser una buena opción para las personas que no pueden usar métodos anticonceptivos hormonales.
Los métodos anticonceptivos de acción prolongada
Son altamente efectivos y requieren administración menos frecuente que otros métodos. Hay tres tipos de métodos de acción prolongada: dispositivos intrauterinos (DIU), implantes y esterilización (ligadura de trompas o vasectomía). Los DIU son pequeños dispositivos en forma de T que se insertan en el útero y pueden permanecer efectivos hasta por 5 años. Son altamente efectivos, con una tasa de falla de menos del 1%. Los implantes subdérmicos, son pequeñas varillas de plástico que se insertan debajo de la piel de la parte superior del brazo y pueden permanecer efectivos hasta por tres años. Son altamente efectivos, con una tasa de fracaso de menos del 1%, pero pueden causar efectos secundarios como sangrado irregular y aumento de peso.